Un año más, el Secretario General de Naciones Unidas ha presentado las prioridades de su agenda de trabajo para 2022. En esta ocasión, Guterres ha destacado “cinco alarmantes incendios globales que requieren la movilización completa de todos los países”.

La urgencia ha sido la tónica que ha invadido su discurso durante el pleno de la Asamblea General, que en su apertura ha destacado la incertidumbre de los tiempos que corren causada por la pandemia de la COVID-19, el avance del cambio climático, la crisis económica, la desinformación y la inestabilidad política:

“La COVID-19 sigue trastornando vidas, planes y esperanzas. La única certeza es más incertidumbre. Mientras tanto, las desigualdades crecen. La inflación está aumentando. La crisis climática, la contaminación y la pérdida de biodiversidad continúan. Nos enfrentamos a un caldero de inestabilidad política y feroces conflictos. La desconfianza entre las potencias mundiales está alcanzando un punto álgido. Y la supercarretera de la información se atasca de odios y mentiras, dando oxígeno a los peores impulsos de la humanidad”.

En este sentido, el Secretario de la ONU, ha alentado a los actores involucrados a no limitarse a enumerar y lamentar estos retos, sino a actuar para resolverlos. En concreto, ha expuesto cinco retos, específicamente sobre la COVID-19, las finanzas mundiales, la acción climática, la anarquía en el ciberespacio y la paz y la seguridad.

1. COVID-19: La urgencia de detener los contagios sin poner en peligro los derechos humanos

La pandemia de la COVID-19 se posicionó en el primer lugar de su lista de prioridades, declarando que “detener la propagación en cualquier lugar debe ser la prioridad de la agenda en todas partes”.  En este punto, también mandó un mensaje importante a los líderes mundiales para que el virus no se utilizara como excusa para poner en riesgo los derechos humanos o dejar a un lado a los países en desarrollo.

Según el Secretario General, la ciencia y el sentido común deberán ser las armas para combatir la pandemia, tanto la del coronavirus como la de la desinformación sobre las vacunas y recalcó que “en lugar de que el virus se propague como un incendio, necesitamos que las vacunas se propaguen como un incendio”; señalando además a la necesidad de priorizar el suministro de vacunas a COVAX (El Fondo de Acceso Global para Vacunas COVID-19).

2. Reformar el sistema financiero global

La reforma del sistema financiero global fue el segundo punto mencionado por Guterres. Éste definió el sistema actual como corrupto, alegando que favorece a los más ricos y castiga a los pobres. En este aspecto, remarcó el fracaso del mismo, pues “una de las principales funciones del sistema financiero mundial es garantizar la estabilidad, apoyando a las economías en las crisis financieras. Sin embargo, ante una crisis de este tipo -una pandemia mundial- ha fallado al Sur Global. […] La divergencia entre los países desarrollados y los países en desarrollo se está convirtiendo en algo sistémico, una receta para la inestabilidad, la crisis y la migración forzada”.

De acuerdo con el Secretario, la solución para reducir esta disparidad se encuentra en la revisión de los mecanismos de gobernanza financiera mundial. En este sentido, abogó por un nuevo marco de reestructuración y alivio de la deuda. Igualmente, se comprometió a seguir impulsando estas reformas fundamentales y utilizar el poder de convocatoria de las Naciones Unidas para promover la inversión en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

3. Abordar la crisis climática

El más alto cargo de la ONU afirmó en su intervención que la batalla por mantener viva la meta de calentamiento del planeta en 1,5º grados Celsius para fin de siglo se ganará o perderá en esta década. Para conseguirlo, hizo un llamamiento a todos los actores, especialmente aquellos responsables del mayor número de emisiones, para provocar “una avalancha de acción este año” y para apoyar a los países menos desarrollados con recursos y tecnología para que transiten hacia las energías renovables.

4. Crear una gobernanza para el ciberespacio

El principal mensaje que mandó en este cuarto punto fue que la tecnología tiene que servir a la humanidad, no usarla.

“Mientras aprovechamos las oportunidades del mundo digital, riesgos como el mal uso de los datos, la desinformación y la ciberdelincuencia ya están superando cualquier esfuerzo significativo para hacerles frente”. 

Para combatir estos riesgos, Guterres alude a la necesidad de crear un sistema de gobernanza en esta área y propone que los primeros pasos para ello se den en la Cumbre del Futuro de 2023 mediante la presentación de un Pacto Digital Mundial. Ésta reunirá a los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil para acordar los principios clave que sustenten la cooperación digital mundial.

5. Poner fin a los conflictos violentos

Por último, pero no por ello menos importante, el representante de Naciones Unidas mostró su preocupación por el cada vez más alto número de conflictos violentos, haciendo alusión a las poblaciones de Afganistán, Colombia, Haití y un largo etcétera de comunidades en situaciones similares.

“Desde los Balcanes Occidentales hasta el Cáucaso… desde la República Centroafricana hasta Chipre y la República Democrática del Congo… desde Iraq hasta la península de Corea y Líbano, desde Mozambique hasta Somalia, desde Sudán del Sur hasta Venezuela y el Sahara Occidental, y más allá, la solución de estos problemas requiere perseverar en los esfuerzos para prevenir conflictos, proteger a los civiles y consolidar la paz”.

Para ello, apostó por la gestión de las divisiones políticas, incluso las que se dan dentro del Consejo de Seguridad de la ONU, y por la inclusión real de las mujeres como parte integral de la toma de decisiones y la mediación y los procesos de paz.

Puedes ver la intervención completa del Secretario General de Naciones Unidas aquí.

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