El impacto que el metaverso tendrá en la sostenibilidad de las empresas aún es un interrogante.  Es pronto para evaluar si los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el metaverso han hecho match. Sin embargo, ya vamos viendo cómo se está desarrollando este universo que está dando tanto que hablar. Quizás no lleguemos a vivir jamás en la Luna, pero parece que una second life ya es posible en este universo paralelo. De hecho, hay experiencias tentativas de primeras comunidades virtuales desde 2003.

Auriculares, gafas, sensores, detectores faciales… son algunas de las herramientas que están apareciendo en nuestras vidas. Sin embargo, ¿nos acercamos a un mundo más verde y sostenible? ¿Las empresas están teniendo en cuenta el paradigma de la sostenibilidad en el metaverso? ¿Garantizará este la igualdad de género (ODS5)? Tal y como avanzamos con las tendencias en sostenibilidad empresarial que marcarán el 2023, es una realidad que la innovación digital está generando nuevos modelos de negocio.

• ¿Qué es el metaverso?
• ¿Qué representa el metaverso para las empresas?
• ¿Promueve el metaverso la sostenibilidad empresarial?
  • Impacto medioambiental
    • Eficiencia del metaverso
    • Fuentes de energía sostenible
    • Impacto en el mundo físico
    • Recopilación de datos
  • Impacto social
    • Sociedades más resilientes y sostenibles
    • Human-first
  • Impacto en la gobernanza
    • ¿Quién manda aquí?
• Oportunidades sostenibles para el metaverso

1. ¿Qué es el metaverso?

Definimos como metaverso a aquellos mundos virtuales donde los usuarios viven, comparten experiencias e interactúan en tiempo real en escenarios recreados. Se trata de una realidad alternativa, un mundo lleno de avatares donde podemos crear y experimentar a nuestra voluntad.

Construir el metaverso requiere de un delicado respeto a un sistema de valores y una ética en el comportamiento. El metaverso también se alimenta de los recursos del mundo en el que habitamos. No es ninguna segunda opción. Debemos tener claro que el truco de Control + Shift + C o escribir motherlode para crear dinero ilimitado en los Sims no funciona en la vida real y las amenazas y crisis del mundo requieren de acciones no virtuales para ser enfrentadas. Por ejemplo,  habitar un mundo virtual no hace que la salud de las personas se vea menos comprometida por el cambio climático, que en España ya afecta a más de 32 millones de personas.

2. ¿Qué representa el metaverso para las empresas?

Actualmente, nos encontramos con múltiples compañías dedicadas a la creación de contenidos, negocios que se dedican a la tecnología blockchain para descentralizar el control de las plataformas o consultoras que se encargan de analizar aspectos legales.

Además, el metaverso también ofrece posibilidades para los NFT, los tokens no fungibles. ¿Qué son? se trata de archivos digitales encriptados en el blockchain; indivisibles, transferibles, escasos y exclusivos. Unos activos que ya permiten acceder a sitios exclusivos en el metaverso.

Pero no son las únicas empresas que podemos encontrar en este universo paralelo. Meta (o el antiguo Facebook) ya se encuentra con Horizon Worlds. Google y su aún proto proyecto Starline. Nvidida y su herramienta para la creación de espacios virtuales, Omniverse. Amazon y Cloud Quest o Nikeland.

3. ¿Promueve el metaverso la sostenibilidad empresarial?

Un universo nuevo requiere de múltiples preguntas. Desde el Pacto Mundial de la ONU España hemos querido reflexionar si el metaverso podría promover un mundo sostenible donde empresas y ciudadanía busquen un planeta más verde, inclusivo y transparente. Un tejido en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y los Diez Principios del Pacto Mundial de la ONU.

Como base de este análisis, hemos querido mirar hacia  los criterios ESG.  De esta manera, nos introduciremos en factores medioambientales, sociales y de gobernanza.

Impacto medioambiental

Eficiencia del metaverso

Aunque nos pueda parecer que no, el metaverso nos ofrece múltiples opciones de cara a un futuro sostenible. Por ejemplo, la contaminación y suciedad asociada a eventos como conciertos se compensarán mediante su virtualización. Los desplazamientos hasta la oficina también reducirán las emisiones. La sostenibilidad hoy en día no se puede entender sin el mudo digital, el Big Data y la inteligencia artificial (IA).

Aunque el metaverso requiera de una gran banda ancha y energía, el uso de internet también ha mejorado. Tecnologías como el WiFi 6 o el 5G consumen menos energía para su funcionamiento. Por ejemplo, los dispositivos conectados con 5G ahorran el 90% de la energía.

La mayoría de las personas expertas señalan el aumento del consumo de energía. Sin embargo, la International Energy Agency ha señalado que, mientras el tráfico de Internet ha aumentado un 16,9% en la última década, el consumo de energía solo ha crecido un 1%.

Fuentes de energía sostenible

ETLA Economic Research ha calculado que el consumo de energía de la industria tecnológica aumentará hasta el 14% para 2030. Un porcentaje que no tiene en cuenta el aumento del volumen de datos. El viaje hacia el metaverso requiere de nuevos dispositivos digitales: gafas, pulseras o auriculares. Construir todos estos gadgets exigirán tanto energía como recursos naturales. Sin embargo, el impacto del metaverso podría ser menor que el que actual.

Todavía estamos a tiempo de que las tecnologías sostenibles tengan un enfoque en las personas, sean ambientalmente saludables y hagan una gestión responsable de los datos.

Impacto en el mundo físico

Si el metaverso quiere el apellido sostenible, el punto desde el que se planifique será el mantenimiento de la capacidad de carga de la Tierra. Una manera de pensar que requiere un cambio integral en funcionamiento y consumo responsable.

Una vida artificial derivará en costes medioambientales más altos. Sin embargo, la innovación en centros de datos ayudará a compensar. Actualmente, y según la Universidad de Lancaster, si el 30% de los jugadores jugara en la nube supondría un aumento del 30% en las emisiones de carbono. Un hecho que no tiene en cuenta la mejoría en la resolución que exigirá el metaverso y el consumo de energía.

Meta, en su memoria de sostenibilidad presentada al Pacto Mundial de la ONU, propone darle al metaverso un lugar donde las comunidades, personas y negocios transcienden  hacia una economía justa y baja en carbono.

Recopilación de datos

Una información irrefutable en el metaverso es que el uso de realidad virtual multiplicará enormemente el volumen de datos. Éstos consumirán una enorme cantidad de energía, que se debe tener en cuenta para el cumplimiento del ODS 7 Energía asequible y no contaminante.

Sobre este hecho, empresas líderes en microprocesadores subrayan que necesitaremos de una eficiencia mil veces superior. Un mundo que no ven tan cercano. La capacidad informática, el almacenamiento de datos y de conexión aún no está suficientemente desarrollado.

Además, la recopilación de información hará proliferar los centros de datos. Puntos cruciales que se tendrán que multiplicar para almacenar la información de un nuevo universo. Algunas compañías están estudiando si el gasto energético para enfriar estos servidores se podría eliminar. Una propuesta es reducir su temperatura a través de su posicionamiento en mares y océanos.

Impacto social

Sociedades más resilientes y sostenibles

Actualmente, se está estudiando un futuro phygital,un lugar donde se tiene presencia tanto en el mundo físico como digital. En este mundo, tendremos nuestra oficina, un lugar para nuestros proyectos, nuestra creatividad e imaginación. Este uso de espacios puede derivar en una sociedad más resiliente.

Un mundo virtual puede generar una mayor sostenibilidad. En cuanto a de desplazamientos, por ejemplo, las oficinas virtuales ahorrarán la contaminación asociada. Además, los micro pagos y monedas virtuales generarán un ecosistema bursátil que ahorrará las monedas físicas y su consecuente huella de carbono. Pero, también tenemos otros efectos a nivel social y cultural. Por ejemplo, hemos visto cómo durante la pandemia el Museo del Prado organizaba visitas virtuales ¿Llegará el momento en que la juventud asista a un colegio virtual?

Human-first en el metaverso

¿Podemos decir que el metaverso es antropocentrista? Aún es pronto, pero ya estamos viviendo cómo los nuevos mundos que empiezan a crearse priorizan las necesidades del individuo, integran opciones de diseño y herramientas centrados en las personas. Un hecho que deja entre signos de interrogación dónde quedan los datos y si se está respetando la privacidad, imagen y seguridad. La interoperabilidad deberá tener en cuenta todos estos factores para crear un marco de gobernanza apropiado.

Aunque se armonicen políticas, la colaboración entre proveedores, creadores, sociedad civil, participantes y la investigación es el primer paso para un metaverso humano. Además, las empresas, gobierno, academia y sociedad civil deben colaborar con estándares que fomenten la innovación y adopten un enfoque de prioridad humano.

Impacto en la gobernanza

¿Quién manda aquí?

Normalmente, cuando hablamos de empresas tenemos en cuenta su territorialidad. Sin embargo, en el metaverso no hay ley o constitución. Una situación que podría crear una inseguridad jurídica, indefensión y desigualdad entre las personas.

El Informe de Riesgos Globales de Davos recoge a corto y largo plazo problemas como el cibercrimen y la ciberseguridad. Sin embargo, debemos reconocer la desigualdad digital y la concentración de poder como parte de esos riesgos mundiales relacionados con al desinformación y pérdida de información.

El metaverso se perfila como un espacio donde se encuentren nuestros derechos como ciudadanos y nuestro poder de consumo. Nuestro ecosistema digital actual necesita evolucionar para acercarse a las reglas de la democracia. Ya que, en este momento, las normas que gobiernan son las normas de carácter privado que están creando verdaderas islas o ciber estados. Grandes actores tecnológicos se están imponiendo para crear universos y dependerá de su mano el poder desarrollar políticas sostenibles adaptadas. Es cuestión de tiempo que se active el debate sobre una ciber soberanía sostenible.

4. Oportunidades sostenibles para el metaverso

La IV Revolución Industrial está creando un mar de oportunidades para el diseño de políticas con implicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Las experiencias inmersivas nos podrán construir un mundo virtual donde se pueda huir de las diferencias que provocan la brecha digital, la desigualdad y la pobreza. Es posible un metaverso con entornos como parques, plazas, estadios, etc. Además, podremos crear canales públicos que ayuden a transmitir conocimientos e información y a vivir experiencias similares.

En concreto, y desde el punto de vista de la igualdad entre géneros, las Naciones Unidas animan a proteger los derechos de las mujeres y las niñas en los espacios digitales y de abordar la violencia de género. especialmente pone el acento en que los avances tecnológicos no perpetúen los patrones existentes de desigualdad de género. Por lo tanto el futuro que se perfile a través de la tecnología ha de ser inclusivo y transformador, lo cual deberá llevar aparejado una educación digital basada en derechos.

El metaverso es un lugar donde aún estamos a tiempo de dar prioridad a una Inteligencia Artificial e Inteligencia Colectiva sostenible. El momento es ahora para crear políticas y promover una estimulación e inversión hacia los ODS.

Todavía estamos a tiempo de que las tecnologías sostenibles tengan un enfoque en las personas, sean ambientalmente saludables y tengan una gestión responsable de los datos.